top of page

Nuevos viejos nombres



Al Profesor DeRose

Pintura con teléfono antiguo, de José Navarro



Me regalaste una palabra ayer: retrónimo. Un nombre que designa algo que en su momento se llamaba de otra manera, pero que en función de los cambios a su alrededor precisa ser rebautizado. Es decir que no basta que la cosa se mantenga prístina, idéntica a sí misma durante milenios, para garantizar que su nombre sea preservado. Todo lo que alrededor sucede modifica el ángulo de las miradas, que claman por nuevas designaciones en pos de seguir ajustándose al significado.


Así la "guitarra" pasó a ser "guitarra acústica" cuando la eléctrica empezó a hacerse famosa. Y el teléfono, "teléfono fijo" cuando proliferaron los móviles.


Hace poco me contaron el argumento más o menos trillado de una serie en que los personajes viajan en el tiempo, realizan intervenciones en el pasado (siempre pienso que en esos planteos el pasado se considera un lugar más que un tiempo) y esas acciones modifican el presente-futuro. Con el retrónimo buscamos zanjar nuestra imposibilidad de viajar al tiempo en que se escuchaba "teléfono" y la imagen que surgía era ese objeto negro, pesado, con un disco que se hacía girar no sin cierto esfuerzo, a veces con desidia, a veces con impaciencia, sintiendo que esa demora del disco en volver al origen era eterna. El teléfono no podía usarse a la hora de la siesta, por el ruido que hacía ese disco al retornar, aunque a veces lo acompañábamos con el dedo, ralentándolo, y consiguiendo con eso atenuar un poco el insidioso ta-ta-ta-ta-ta que despertaba a cualquiera. En mi infancia había uno de esos en casa de la abuela Irma.


Teléfono. Teléfono. Escribo un par de veces la palabra para descubrir qué surge primero en mi pensamiento cuando la pronuncio. Hay muchas formas de describir lo que ese aparato habilita: comunicación, desentendimiento, citas, desencuentros, rupturas, conciliábulos, soledad... conexión y desconexión a un tiempo. Si digo "teléfono fijo" en cambio, me visitan otras asociaciones.


Los nombres del pasado no están tranquilos.



You feel future memories coming through, they´re clearly out of sight,

where the melody is running no one knows but you what´s right.

Tema "Memories of tomorrow", letra de Stanley Cornfield, música de Keith Jarrett



Entradas destacadas
Entradas recientes
bottom of page