Sentido poco común

Imagen de la película Stand by me

El sentido común es el opio del comportamiento. Sabemos lo que tenemos que hacer porque estamos encarrilados, sin posibilidad real de elegir otras cosas. Cuando empezás a pensar en otras opciones de conducta descubrís que pisás terreno cenagoso, te desviás, literalmente.

Desviarse, salir de las vías. No puede ser tan malo. Pero en general se relaciona con dar un paso en falso, irse a los extremos, hacer todo un poco o mucho peor que antes. Desviarse para arriba, para más, para mejor, es un desafío, no se ve a menudo. ¿Y cómo sería?

Difícil dar ejemplos de lo que está relacionado con aspiraciones personales. Pero seguro que, considerando dos parámetros, libertad y disciplina, cualquier nuevo camino abierto en la espesura puede transformarse en una vía transitable.

No ir con la manada requiere un esfuerzo extra. La yunta se arma en todos los grupos humanos, y es muy fácil y tentador dejarse llevar por la corriente. Entonces, punto uno: desviarse hacia una ruta aún no trazada es más viable con libertad y disciplina; punto dos: elegir la manada que va por las vías que uno elige, o a la que le gusta desbravar el terreno, y si en vez de ser manada es humanada, mucho mejor.